La frase



“Tan real como una fragancia”.
Jorge Drexler, Eco.



viernes, febrero 26

La magia del yerberito

Ya decía yo que Uribe no quedaba. Quién lo diría, pero ni siquiera pudo presentarse.

La Corte Constitucional dijo que el referendo no se podía ejecutar, por lo tanto, Uribe no puede lanzarse a la presidencia.

Ojalá cese esta horrible noche, aunque con estos candidatos quedaremos en unas manos y en un pensamiento igual. Claro que ninguno es tan inteligente y tan hábil para enredar a la gente como Uribe.

Uribe no queda, Uribe no queda, Uribe no queda.... ¡Y POR FIN NO QUEDÓ!

Vamónos de rumba por eso.

jueves, febrero 18

Bienvenida

Mi espalda no me duele, mi cuello no me aqueja.

No madrugo nada y trasnocho todos los días.

Leo lo que quiera sin pensar en hacer trabajos.

Veo noticias sin que ningún profesor me pregunte qué hay para hoy.

No tengo ojeras pero sí muchos sueños.

No hay afán en mi rutina y tampoco hay rutina.

Eso son las vacaciones. Eso fueron las vacaciones que acabaron esta semana. Bienvenidos los dolores de espalda, de cuello y de cabeza. Ya empiezan los horarios de levantarme a las 6 de la mañana y acostarme a las 9 de la noche. No más leer literatura de corrido ni ver noticias sin que me pregunten qué hay para hoy. Otra vez el afán y otra vez los sueños que empiezan a desdibujarse. De nuevo regresan los pesimismos de la carrera y de la vida. Retorno a pensar qué pasará mañana.

Como se nota que ya entré a estudiar.

La Cumbia política

Antonio Vargas dice que vio hacer propaganda política a dos candidatos a la Cámara y al Senado en un stand de Acción Social. Carlos Enrique Soto y Didier Burgos, ambos del Partido de la U, son dichos candidatos.

Vargas, director del periódico pereirano Primera Plana, afirma que vio cómo estos dos personajes le decían a la gente que votaran por ellos a cambio de un lote, un televisor o de la permanencia en el programa de la presidencia Acción Social.

Soto dice que son calumnias.

Un noticiero de Pereira publicó una filmación en la que se corroboran las palabras de Vargas.

Soto sostiene que él tiene una larga experiencia política que lo respalda y en la que ha sido un hombre de fiar.

Vargas cuenta que los de la Secretaría de Gobierno le quitaron su puesto a un vendedor de arepas por no permitir que los señores Carlos Enrique Soto y Didier Burgos pusieran propaganda política en su negocio.

Soto vuelve a asegurar que es un montaje para hacerle mala propaganda.

Yo, de ahora en adelante, aseguro que me llamo Cumbia.